puedo entregarme a ella
en sus sueños
murmurándole sus propios poemas
al oído
mientras duerme a mi lado
¿será porque siempre anhelas, corazón,
que siempre enciendo una lámpara
en el naranja del ocaso?
dulce y triste
como un amor sobrecogido
por largos suspiros
de lo profundo de un sauce
poco a poco
va saliendo la luna
la tierra parece
una magnífica
flor de loto
cuando el sol se alza
sobre el paisaje nevado.
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